El nuevo smartphone de gama alta de Samsung, que tan solo lleva un mes en el mercado, parece dispuesto a superar a su principal competidor y actual líder de ventas, el iPhone de Apple. Según Shin Jong-Kyun, codirector ejecutivo de la empresa, esperan alcanzar la cifra de más de diez millones de terminales vendidos a final del mes de mayo. Una cifra que batiría todos los récords de la empresa coreana si la comparamos con el tiempo que tardaron sus predecesores en alcanzarla: 50 días, el Samsung Galaxy S3 y 5 meses el Samsung Galaxy S2 en el año 2011. Samsung es sin dudarlo el fabricante número uno de smartphones con sistema operativo Android que, según Gartner, se ha hecho con un 30.8 % de las ventas en todo el mundo de terminales inteligentes, seguido por su principal competidor Apple que acumula un 18.2 % y por LG, con un 4.8 %.
Las opiniones sobre el nuevo terminal de Samsung son muy variadas y, si bien es verdad que el diseño del mismo no es su mayor novedad, sus principales bazas son su peso ligero y la opción Smart Scroll que permite dinamizar la navegación por páginas web con la mirada.